Escrito por Jennifer Chien
Traducido por Hernán Goicochea
Editado por Maribel Suárez
El 17 de julio, Tzu Chi USA llevó a cabo una distribución de alimentos por autoservicio en la Escuela Secundaria Baldwin Park, en California. Allí, los voluntarios colocaron bolsas llenas de víveres de manera rápida y eficiente en los maleteros de cada auto que conducían los beneficiarios.
“Un gran porcentaje de nuestros estudiantes proviene de familias con bajos ingresos”, dijo Gilberto Rodriguez, el director de la escuela secundaria. Durante el evento, el mismo director habló con sincera emoción al describir la difícil situación de sus jóvenes estudiantes. “Más familias se han quedado sin hogares, y algunas se han refugiado temporalmente en moteles locales”, decía.
Durante la pandemia, las familias de muchos estudiantes de la Escuela Secundaria Baldwin Park se vieron afectados por la falta de empleo. Muchos se vieron obligados a abandonar sus hogares, al no poder pagar la renta y ahora, se están quedando en moteles locales, los cuales pudieron lograr a través de los Servicios Sociales del condado. La escuela visita los moteles todos los martes para entregar víveres a las familias.
Apoyando a los estudiantes de familias con bajos ingresos
Baldwin Park es una pequeña ciudad que está ubicada en el Valle San Gabriel del condado de Los Ángeles. Según las estadísticas de 2019, la ciudad tiene una población de aproximadamente 75.251 habitantes. El 74% de la comunidad es hispana o latina, y el 14% de la población vive en pobreza. La proporción de hogares con bajos ingresos menos de USD $50.000 dólares anual está cerca del 40% y, por lo tanto, los habitantes han enfrentado muchas dificultades durante el transcurso de la pandemia del COVID-19.
“Hay 1.700 estudiantes en nuestra escuela secundaria; el 95% de los estudiantes provienen de hogares con bajos ingresos, de los cuales, 150 estudiantes están registrados como personas sin hogar”, dijo Josefina Steinmetz, la subdirectora. “A medida que la pandemia continúa, más y más familias en la comunidad enfrentan dificultades financieras”.
La escuela necesitaba con urgencia 50 bolsas de alimentos para familias que pasan por dificultades. Por eso, presentaron una solicitud ante el distrito escolar. Luego, la Oficina de Educación del Condado de Los Ángeles lo remitió a Tzu Chi USA. Los voluntarios realizaron una evaluación el 13 de julio, decidieron distribuir 100 bolsas con víveres.
Cristina Quiroz, especialista de programa para la Iniciativa de Escuelas Comunitarias en el condado de Los Ángeles, describió la necesidad inmediata de alimentos para las familias. Maria Pera, la coordinadora de alcance para el condado de Los Ángeles 211, recomendó a Tzu Chi USA porque sabía que podría proporcionar inmediatamente las 50 bolsas de alimentos necesarias. De hecho, cuando Cristina se puso en contacto con Tzu Chi, los voluntarios organizaron directamente actividades. En una semana, los voluntarios decidieron realizar una distribución de alimentos, para las familias necesitadas en la escuela secundaria.
Forjando amistades después del incendio en Woolsey
En aquel entonces [2018], después del incendio en Woolsey, los voluntarios de Tzu Chi se movilizaron rápidamente y brindaron asistencia a los sobrevivientes, lo que dejó una profunda impresión en mi mente. Los vi nuevamente en junio en Huntington Park City durante una distribución organizada, así que cuando supe que una escuela en el condado de Los Ángeles necesitaba comida urgentemente, inmediatamente pensé en Tzu Chi.
La idea de haber dejado una impresión tan profunda, después de ayudar a los sobrevivientes del incendio en Woolsey hace dos años, conmovió sinceramente los corazones de los voluntarios de Tzu Chi. Después de recibir la solicitud urgente de la Oficina de Educación, los voluntarios fueron al lugar para realizar su evaluación y obtener una mejor comprensión de las necesidades de la comunidad. Una vez terminada la evaluación, comenzaron a preparar los trámites y compras necesarios para la distribución de alimentos.
Esta primera distribución de alimentos fue dirigida para las familias de los estudiantes de la Escuela Secundaria Baldwin Park. Sin embargo, James Chen, director del Centro de Servicio Tzu Chi Valle San Gabriel, dijo que propondría llevar a cabo distribuciones de alimentos mensualmente en la que los voluntarios pueden proporcionar hasta 500 bolsas de víveres para los necesitados.
La pandemia cambió todo
Sonia Valencia, una madre soltera, explicó que sus ingresos se han reducido significativamente debido a que le rebajaron horas en el trabajo. Primero, tiene que pensar y decidir si puede pagar los gastos necesarios, como la renta y las facturas básicas, y entonces ella y su familia evitan todas las compras innecesarias, para así reducir los gastos. Su familia siguió atentamente las medidas de quedarse en casa para evitar infecciones y proteger a quienes los rodeaban. Sin embargo, sus gastos de subsistencia han aumentado en comparación con el año pasado, la vida se ha convertido en algo muy difícil para ellos.
Ada Martin solía trabajar como asistente dental en una clínica privada. Era un trabajo bien remunerado, pero ahora está desempleada debido a su cierre de la clínica dental. Aunque todavía tiene ingresos, son mucho menos de los que necesita, para cubrir los gastos de cuatro personas en casa.
Juan Cadena vino a la distribución para ayudar a alimentar a su familia de cuatro. Es el único que obtiene ingresos. Debido a la pandemia, sus horas de trabajo también se han reducido, por lo tanto, sus ingresos se han reducido a más de la mitad.
Poniendo comida en la mesa
La compasión es inspirada desde dentro; las bendiciones son creadas a través de la acción.
Michael Sanders, el guardia de seguridad de la escuela secundaria, nos informó que la comunidad tiene una gran necesidad de ayuda. Aunque la escuela se encuentra en vacaciones de verano, el distrito escolar continúa distribuyendo desayuno y almuerzo a los estudiantes de lunes a viernes, ya que muchas familias no pueden pagar el costo de comidas nutritivas. Michael también ayuda con la distribución de alimentos al ir al motel todos los martes.
A finales de mayo, California reabrió algunos sectores comerciales. Sin embargo, el número de casos confirmados aumentó a principios de julio. Esto llevó a California a anunciar el cierre de estos sectores comerciales una vez más. Muchas personas sienten la incertidumbre de cuándo ocurrirá la próxima reapertura, pero saben lo importante que es mantenerse a salvo, y poner fin a la pandemia. Los corazones de los miembros de la comunidad duelen y los nervios están crispados, pero los voluntarios de Tzu Chi continuarán tomando medidas cuidadosas y positivas para tranquilizar a las familias, asegurándose de que estamos aquí para ellos.
