Escrito por Kai Cheng Yang, Mei Juan Su
Adaptado al español por María Pacheco Valles
Editado por M. Carolina Saheli
El pasado 30 de julio, la organización budista Tzu Chi junto al gobierno municipal de la ciudad de Tijuana, en México y la concejal municipal, Miriam Echeverria, distribuyeron mochilas y útiles escolares a 1,000 niños que viven en zonas empobrecidas de Tijuana. Miriam Echeverria, es la directora del Comité de Educación en Tijuana, y por esta razón organiza la distribución cada año con el propósito de ayudar al mayor número posible de niños. Durante esta distribución, Tzu Chi donó un total de 600 mochilas, 800 cuadernos, lápices, reglas, compases, libros de dibujo y otros útiles que ayudarán a los niños a regresar felices a la escuela.
Dando lo mejor por los niños
La concejal Miriam Echeverria inició el programa de ayudas escolares para niños, hace nueve años. Durante esa época sólo podían ayudar a 50 estudiantes, pero con tiempo y dedicación, el programa creció y ahora cientos de niños reciben este preciado regalo. Gracias a la invitación de la concejal, Tzu Chi se comprometió en donar útiles escolares. A principios de año, los voluntarios de Tzu Chi contactaron a los principales proveedores escolares en Estados Unidos y compraron lo necesario. Los suministros se enviaron a través de la frontera entre Estados Unidos y México a finales de junio.
Si Hong Wang, voluntario de Tzu Chi, mostró admiración por el trabajo hecho por Miriam Echeverria. “La concejal es nuestra voluntaria y nuestra buena amiga. Ella nos ayudó a resolver algunos de los problemas que Tzu Chi enfrentó al principio en Tijuana, y estamos muy agradecidos. Nos pidió que la ayudáramos esta vez, y estábamos felices de venir y participar en la distribución juntos. Nos reconforta ver a casi mil niños aquí recibiendo material escolar”, comentó Si Hong Wang. Vale la pena destacar que todas las mochilas, cuadernos y otros útiles escolares fueron donados por Tzu Chi.
La Maestra Cheng Yen nos dijo que cuando damos algo a los demás, debemos dar lo mejor; queremos dar algo que quisiéramos para nosotros mismos, y eso es lo que hemos hecho.
Si Hong Wang
Voluntario de Tzu Chi
Si Hong Wang también explicó que el área donde se hizo la distribución de útiles, se conoce como “la más pobre de los pobres”. El voluntario de Tzu Chi, agregó que “el año escolar está a punto de comenzar, y estos niños realmente no pueden permitirse comprar los suministros escolares, así que les estamos dando lo que más necesitan, y además, es lo mejor que está disponible en Estados Unidos. Todos podemos ver lo felices que están los niños, y todos estamos felices de poder ayudar”.
Muchas personas fueron beneficiadas
Por su parte, Miriam Echeverría, se mostró agradecida y feliz debido a que el número de niños beneficiados ha sido uno de los más altos en todos estos años. “Es el noveno año que organizamos este evento. Hoy estamos en un área muy desfavorecida y nos alegra poder proporcionar a los niños los suministros escolares básicos, para que puedan tener todo lo necesario cuando regresen a la escuela, ya sea en la escuela primaria, secundaria o preparatoria. Estamos agradecidos por la ayuda de Tzu Chi para hacer felices a muchos niños y aliviar a las familias de la carga de comprar material escolar”, comentó la concejal.
Estamos agradecidos por la ayuda de Tzu Chi para hacer felices a tantos niños.
Miriam Echeverria
Concejal municipal de Tijuana
Este evento fue posible gracias al trabajo de los voluntarios de Tzu Chi, quienes viajaron desde Estados Unidos, así como los voluntarios del concejo municipal. Si Hong Wang afirmó que la ayuda estuvo dirigida a estudiantes de preescolar, primaria, secundaria y preparatoria.Todos recibieron mochilas diferentes y útiles escolares como cuadernos, bolígrafos, lápices y sacapuntas según sus necesidades. “Entregamos los útiles pero también las revistas de Tzu Chi, para que así conozcan más sobre nuestro trabajo”, dijo Si Hong Wang.
Jarumi Ramírez Martínez, quien trabaja en el concejo municipal participó en el evento junto a sus hijos Ramsses y Yamile. “Estoy muy agradecida y satisfecha. Hemos pasado de ser un pequeño grupo de personas hace algunos años a un gran grupo de voluntarios que ayudan en la distribución”. En años anteriores los hijos de Jarumi recibieron esta ayuda lo que les permitió asistir a la escuela.
Jarumi también compartió los cambios que ha visto a lo largo de los años en la distribución: “Todo lo que puedo decir es que estoy muy agradecida con la concejal Miriam por toda la ayuda que nos ha dado. Es satisfactorio para nosotros ver que la distribución crece con los años”.
Los voluntarios trabajaron en equipo para hacer la diferencia en la vida de todos los beneficiarios que llegaron ese día, entre ellos nuevos beneficiarios y otros que ya conocían de distribuciones pasadas.