Escrito por Huaxun Chan
Traducido (Inglés) por Huanxun Chan
Traducido (Español) por Hernán Goicochea
Editado por Maribel Suárez
El 8 de noviembre de 2018, el incendio Camp Fire destruyó trágicamente la ciudad de Paradise – ubicada en el condado de Butte – y devastó las comunidades cercanas de Magalia y Concow. Hasta la fecha, Camp Fire, es el incendio forestal más mortal y destructivo, registrado en la historia de California. Sus llamas envolvieron 153.336 acres de terreno y destruyeron 18.800 estructuras. En respuesta al llamado de emergencia, los voluntarios de la Fundación Tzu Chi, se movilizaron rápidamente, brindando consuelo y alivio a las personas afectadas por la tragedia.
En el transcurso de dos años, el equipo de recuperación a largo plazo, ha concentrado sus esfuerzos en estas dos comunidades, que continúan luchando con recursos limitados. Han estado ayudando a los sobrevivientes a reconstruir sus vidas, al brindar servicios y recursos de administración de casos de desastres a la comunidad, a través de eventos de distribución y brigada médica.
“El progreso de la recuperación durante dos años ha sido lento”, dijo Minjhing Hsieh, director ejecutivo de la Oficina Regional Tzu Chi Noroeste. “Los recursos del gobierno son amplios, pero el proceso de solicitud para cada paso, es particularmente desafiante para los sobrevivientes. Por tanto, el número de familias que se establecen con viviendas estables es reducido. Hemos decidido hacer el viaje con ellos. Exploraremos las diferentes formas y soluciones para ayudarlos, con la esperanza de que los residentes de la comunidad puedan recuperar y llevar una vida sustentable”.
Juntos en Oración
Cuando empezó la temporada de invierno en el condado de Butte, la temperatura experimentó un descenso sustancial, el cielo rodeado de nubes densas y turbulentas. Los trozos de azul que se asomaban, sin embargo, sirvieron como recordatorios de que el Incendio North Complex había disminuido por fin.
El día 8 de noviembre de 2020 marcó el segundo aniversario del Incendio Campfire, y esa mañana, la primera nevada del año cayó en Concow.
En el campamento del Lago Concow, existe un espacio vacío entre los altos cedros, pinos y robles. Ahí, un grupo de personas de la tribu Maidu, se pararon, formando un círculo. Llevaban puestos atuendos tradicionales, se encontraban listos, para ofrecer sus oraciones en este día de enorme importancia en todas sus vidas.
Seis voluntarios de la Fundación Tzu Chi, vinieron desde San José y Chico, para asistir a la ceremonia, caminando con miembros de la tribu, para sentarse entre los árboles. Los rostros familiares de otros miembros de la comunidad y los clientes de gestión, en casos de desastre Tzu Chi, también estaban sentados cerca. Los asistentes formaron un pulcro anillo exterior con el anillo interior formado por bailarines, y en el mismo centro, una hoguera. El líder de la tribu fue el anfitrión de la ceremonia, se tomó un momento reverente, para explicar los rituales y su significado en inglés, y luego dirigió las oraciones en el idioma maidu. Mientras el líder cantaba las canciones de oración, otros siguieron con la percusión tradicional y los bailarines con tocados de plumas actuaron alrededor de la hoguera en dirección contraria a las agujas del reloj. La ceremonia duró 80 minutos, y la oración sincera en medio de la madre naturaleza fue profundamente conmovedora de presenciar.
“La oración ha incluido la expresión de amar y ser respetuoso con la naturaleza”, expresó Hsieh, después del evento. “También dice que en este universo cósmico e ilimitado, frente a desastres y calamidades, los seres humanos deben ser humillados, abriendo nuestros corazones, para amar a todos los seres sintientes y protegiendo la naturaleza. ¡Guauu! ¡Qué familiar es esto para los miembros de Tzu Chi! “. Para evitar interrupciones, se prohibió el uso de cámaras filmadoras durante el evento, así cada participante pudo dedicar toda su atención a su propia interconexión con la naturaleza y la oración.
Llevando calidez a viejas amistades
Desde que estalló el Incendio Camp Fire y causó una destrucción masiva, los voluntarios de Tzu Chi han estado brindando su atención a las familias que residen en Concow. Si bien algunos residentes han podido reconstruir sus hogares y se han adaptado a sus nuevas vidas, la mayoría todavía se encuentra en camino hacia la recuperación. En el segundo aniversario, los voluntarios visitaron a los sobrevivientes que no se habían vuelto a conectar con ellos durante algún tiempo.
Aunque residía en una zona de incendio de alto riesgo, la casa de la familia Moak, afortunadamente, sobrevivió al Incendio Camp Fire de 2018 y al Incendio North Complex de 2020. Cuando los miembros de la comunidad de Concow se reúnen durante el aniversario de Camp Fire, Pete Moak comparte la experiencia de los nativos americanos con la prevención de incendios y anima a la comunidad a colaborar. Foto: Huan Xun Chan.
En noviembre del año pasado, la ferretería Pines Yankee Hill, abrió su espacio para que los voluntarios de Tzu Chi, pudieran organizar una distribución de invierno. Este año, los voluntarios se reunieron con el dueño de la tienda, Steve Miller, y le dieron una bufanda ecológica y una bolsa de arroz instantáneo Jing Si, también cálidos regalos para el invierno. Kim Stayart, residente de Concow, se había reunido con los voluntarios la primavera anterior. Afortunadamente, su casa sobrevivió el incendio, pero debido a la pandemia, no había podido reunirse con ellos días antes, pero al reencontrarse con los voluntarios, le regalaron una bufanda ecológica y una bolsa de arroz instantáneo Jing Si. Stayart agradeció por los artículos y prometió guardarlos, para alguien más que los necesite.
Cerca de la autopista 70, los residentes de Concow organizaron un almuerzo comunitario en un restaurante para el aniversario. Los voluntarios de Tzu Chi, se unieron a esta oportunidad para distribuir más bufandas ecológicas y arroz instantáneo Jing Si a los sobrevivientes, entregando su amor y calidez a través de los obsequios a medida que se acerca el clima frío.
Una oportunidad para compartir
La Iglesia Comunitaria Magalia se ha convertido en un socio vital mientras Tzu Chi trabaja en sus esfuerzos de recuperación a largo plazo. El año pasado, durante el primer aniversario del Incendio Campfire, los voluntarios de Tzu Chi se unieron a la inauguración del monumento “Butte Strong” en la iglesia. El monumento fue construido con ladrillos de casas dañadas y es un poderoso símbolo de la fuerza de corazón de la comunidad. En la propiedad de la iglesia, aproximadamente 15 hogares continúan viviendo en casas rodantes y remolques. Los voluntarios de Tzu Chi fueron a cada uno de ellos con regalos para que pudieran pasar el invierno.
Debido al clima frío, fueron pocas las personas que asistieron al evento de aniversario, pero el amor aún era tangible en el aire. Mientras los voluntarios esperaban, una mujer llamada Aly Gilbert, se acercó a la mesa y expresó su interés en aprender sobre Tzu Chi y sus misiones. Aly valora sinceramente la oportunidad de descubrir historias convincentes y las comparte en Facebook, para que otros se inspiren. Minjhing Hsieh presentó a Tzu Chi y la historia detrás de los artículos ecológicos de Tzu Chi y el arroz instantáneo Jing Si. Después de conocer las historias, Aly Gilbert expresó que estaba contenta de haberla visitado y podía sentir la energía positiva de los voluntarios.
"Sea un agricultor espiritual que cultiva campos de bendiciones para sí mismo, y para los demás"
Aforismo Jing Si de la Maestra Cheng Yen