Escrito por Shuli Lo
Traducido y adaptado al español por Gabriela Barzallo
Editado por M. Carolina Saheli
El amor de los voluntarios de Tzu Chi se extiende por todos los rincones del mundo, vistiendo el color azul, el color característico que encontrarás donde sea que se necesite ayuda. En Tijuana, México, existe un grupo de guardianes de residentes vulnerables y enfermos que difunden el amor y la bondad de Tzu Chi para aliviar sus mentes y cuerpos.
Sihong Wang, un voluntario de Tzu Chi que ha vivido durante mucho tiempo en Los Ángeles, California, se jubiló luego de trabajar como doctor de medicina china y dedicar su vida a la caridad. Él y Kunrong Xie, que vive en San Diego y habla español con fluidez, crearon la Mexican Care Mission USA para brindar alivio, asistencia médica, financiera y alimentaria a quienes sufren de pobreza.
Durante 17 años, Sihong Wang ha viajado seis horas entre Tijuana y Los Ángeles cada semana. Él se queda en Tijuana, tres o cuatro días a la semana, ayudando a los residentes enfermos y empobrecidos a encontrar alivio a través de la acupuntura. En sus visitas también entrena a nuevos voluntarios para que puedan servir juntos a los residentes.
A lo largo de los años, Sihong Wang ha practicado la compasión que Tzu Chi enseña para superar las dificultades. En una entrevista, Sihong Wang dijo: “Me gusta ver a los demás felices y ayudarlos a aliviar el dolor. Después de conocer a Tzu Chi, me inspiré mucho más. En México, sentí el sufrimiento de la gente, por eso decidí hacer trabajo voluntario y transmitir la compasión allá”. En 2022, la Mexican Care Mission USA, inspirada en la filosofía de Tzu Chi, regresó a ser parte de la Fundación Budista Tzu Chi ayudando a que los sueños e ideales de Sihong finalmente se hagan realidad.
La voluntaria de Tzu Chi, Kunrong Xie, se casó con Guangzhou en los Estados Unidos cuando tenía 17 años. Luego, se mudó a México y con su esposo vivieron en Tijuana en donde aprendió a hablar español con fluidez. Al ver el sufrimiento de los niños vulnerables y sin educación allí, se comprometió en ayudar una vez que tuviera suficientes recursos para hacerlo.
Sihong Wang se encontró con Kunrong Xie con quien comparte objetivos y pasiones. Formaron un gran grupo de trabajo sirviendo en iglesias en áreas vulnerables, y contribuyendo a sus ideales. Su espíritu desinteresado fue tan reconocido por los residentes locales que un paciente se conmovió por su entusiasmo y donó un terreno que sería utilizado como base para obras de caridad. Hoy en día, allí se han creado habitaciones y clínicas.
Sihong Wang y Kunrong Xie entregaron una gran cantidad de suministros médicos y de distribución a Tijuana en cada espacio disponible. Sihong Wang sale a las seis de la mañana de Los Ángeles con los suministros necesarios y conduce dos o tres horas hasta la casa de Kunrong en San Diego. Kunrong Xie conduce desde San Diego hasta la casa de Sihong cada dos meses llevando materiales donados a Tijuana.
La voluntaria de Tzu Chi, Xiuyun Cai, esposa de Sihong Wang, fue una de las fundadoras de Tzu Chi en los Estados Unidos. La pareja comparte los mismos ideales filantrópicos. Xiuyun expresó que admira la seriedad y compasión de su esposo Sihong. Sihong a menudo hace bollos al vapor con azúcar morena, mientras que Xiuyun, quien es muy amigable, distribuye los bollos en las actividades de Tzu Chi.
Durante más de diez años, Sihong y Kunrong han trabajado arduamente en Tijuana. Los hogares de ancianos, los hogares para personas sin hogar y las aldeas de SIDA están bajo su cuidado. Se otorgan becas a los niños que tienen dificultades ayudándolos a finalizar sus estudios. El subsidio médico permite que los pacientes reciban un buen tratamiento y se recuperen lo antes posible.
Nuestro objetivo común es hacer el bien con amor. Eso lo entendemos muy bien.
Xiuyun Cai, Tzu Chi USA Volunteer
La ciudad de Tijuana todavía tiene un largo y arduo camino para salir de la pobreza. Con el tiempo, esta ciudad se convertirá en una gran tierra de bendición. ¡Cuanto más nos unamos, más fuerte levantaremos a Tijuana!