Escrito por Shirley Wu
Traducido por Hernán Goicochea
Editado por Maribel Suárez
En tan solo pocos meses, el nuevo coronavirus ha puesto de rodillas a muchas naciones alrededor del mundo. Tanto así, muchos gobiernos se han visto obligados en implementar medidas drásticas, para evitar la propagación del virus, causando impactos fuertes en la economía global y cambiando por completo el sistema social. Tras la llegada del virus a los EE.UU., la ciudad de Dallas, Texas, resultó ser una de las ciudades fuertemente afectadas. Y para abordar las necesidades que existen por dentro, los voluntarios Tzu Chi de la Oficina Regional Central comenzaron a crear esfuerzos, para brindar ayuda a la gente de la comunidad.
En Dallas, el número de casos confirmados de personas con COVID-19 continúa aumentando, llegando a casi los 1.500 a partir del 14 de abril, para empeorar la cosas, existe una escasez de mascarillas en todos los sectores.
Debido a la escasez, voluntarios de la Oficina Regional Tzu Chi Central comenzaron a preparar suministros médicos para salvaguardar la salud pública y brindar atención durante este gran momento de necesidad. Lo cual, lo han hecho a través de la impresión de cartas que ofrecen condolencias y empaquetando mascarillas para entregar a los habitantes. En un solo día, los voluntarios prepararon la cantidad suficiente de paquetes, y estarán listos para su distribución este 10 de abril desde la oficina Tzu Chi en Richardson.
Al llegar el momento de distribuir los paquetes, se elaboró tres categorías. El primer lote de mascarillas fue reservado para los miembros de la familia Tzu Chi (ver arriba). Luego, el segundo fue para las organizaciones comunitarias que presentaron solicitudes vía página web; El tercer lote de mascarillas, para los residentes locales quienes necesitaban protección básica.
Además, se enviaron paquetes de mascarillas al personal educativo y a los estudiantes de la escuela Tzu Chi Great Love Preschool & Kindergarten. Esto aseguró que todos quienes forman parte de la familia Tzu Chi sean atendidos.
En la Academia Tzu Chi, padres de familia obtuvieron sus mascarillas por drive-thru para hacer las cosas con seguridad y prevenir contraer cualquier tipo de infección. Todo, mientras recogían a sus hijos quienes se encontraban asistiendo a la escuela dominical china. De esta manera, mantiene a los padres en el automóvil y reduce la incidencia de contacto para los voluntarios llevando a cabo la distribución.
Para mucho de los padres, recibir aquel paquete de mascarillas significó bastante y se sienten muy agradecidos con la fundación. De hecho, durante la distribución, uno de ellos trajo donas como manera de agradecimiento.
En circunstancias normales, cualquier distribución a gran escala resulta ser una gran empresa, ya que para llevarlos a cabo requiere muchos motores, incluso más durante una pandemia donde los suministros son cortos o retrasados. Más que nada, la mano de obra enfrenta limitaciones y restricciones inusuales (por ejemplo, el distanciamiento social). Sin embargo, Tzu Chi Central mantiene su compromiso de servir a la comunidad.
En el futuro, las distribuciones se centrarán en las comunidades de color. Incluso, las poblaciones chinas, tailandesas y vietnamitas de Dallas. De esta manera, Tzu Chi Central trabaja para asegurarse de que nadie se quede atrás.
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