Escrito por Jennifer Chien, Suong Chang
Traducido por Hernán Goicochea
Editado por Maribel Suárez
Estamos en el mes de abril, por lo que significa la llegada de la primavera. Sin embargo, todavía hace un poco de frío aquí, en el soleado sur de California. Pero aun así, a través de la lluvia frías, y fuertes con una temperatura exterior de 9 grados Celsius, los voluntarios Tzu Chi se sienten comprometidos en completar su misión: llevar a cabo la entrega de suministros médicos al Centro Médico Kaiser Fontana.
Unidad En Medio De La Pandemia
Como manera de expresar su agradecimiento por aquella donación, los doctores Samir Johna (Director del Programa para Residentes de Cirugía General), Mark Bai (Director Médico Asistente) y Philip Shie estuvieron presentes en la entrada principal para darles la bienvenida a los voluntarios Tzu Chi.
Durante la entrega, los voluntarios explicaron al personal de médicos que solo pudieron traer 2.000 mascarillas quirúrgicas, y se disculparon por la insuficiencia de mascarillas N95. Pero esperan regresar tan pronto como estén disponibles.
Creo que lo que usted [Tzu Chi] hizo hoy encarna el de un buen modelo para la comunidad, que muestra el poder de la unidad para combatir la enfermedad. No importa cuantos suministros se donen, cada donación de la comunidad es maravillosa. Ayudará a los trabajadores médicos a luchar valientemente, y todos esperamos que la pandemia termine pronto.
Con Sincera Humildad
“En un clima como este, nos trajeron estos suministros médicos”, expresó el Dr. Philip Shie al firmar el recibo de confirmación. “Mi sincera gratitud desde lo más profundo de mi corazón. Especialmente con una actitud tan respetuosa y humilde, la cual nos hace sentir la bondad entre las personas. ¡Gracias!” Al entregar los suministros, los tres médicos se inclinaron ante los voluntarios. Respondiendo su gesto, los voluntarios colocaron sus manos juntas frente a sus cofres para devolver el arco de agradecimiento.
El Dr. Mark Bai espera que la buena relación que tiene Tzu Chi dentro de la comunidad en Inland Empire pueda generar más conciencia sobre las medidas preventivas. Medidas necesarias como lavarse las manos con frecuencia, mantener distancia social, evitar tocarse la cara y usar mascarillas (o una cubierta facial) para evitar la propagación del COVID-19. Las cuales ayudaran en aplanar la curva.
Después de recibir los suministros, los médicos llevaron las cajas de mascarillas hacia otros edificios que forman parte del hospital.
El Compromiso de Tzu Chi
La segunda parada fue en el Centro Médico de la Universidad Loma Linda, un instituto de salud ubicado en el condado de San Bernardino reconocido por su tecnología avanzada, atención médica orientada a servicio y educación. Kent Broersma, el gerente de almacén del hospital, había presentado una solicitud a la fundación Tzu Chi a través de su página web el 7 de abril. Poco después, los voluntarios se comunicaron con Broersma y así, fue como se llevó a cabo la entrega de 8.000 mascarillas el 9 de abril.
Los voluntarios prometieron regresar con más donaciones.
“Nosotros [el hospital] estamos en una ubicación tan remota, no es fácil para ustedes [Tzu Chi] venir. Pero en cambio están disponibles a regresar de nuevo. Estoy realmente conmovido”, dijo Broersma. “En nombre de los trabajadores de la salud del hospital, me gustaría agradecerles. Aunque no pueden venir a agradecerles en persona, creo que deben pensar lo mismo”.
El personal del almacén inmediatamente subieron las cajas de mascarillas a su camioneta para entregarlas a múltiples ubicaciones en el centro médico Loma Linda. Mientras la camioneta seguía su camino, los voluntarios movían sus manos despidiéndose y enviando sus bendiciones a los trabajadores de la salud.
Llevando A Cabo Las Entregas En Medio De La Lluvia
Suong Chang, una de las voluntarias, fue el punto de contacto para las donaciones. “Los dos hospitales tomaron la iniciativa de llenar una solicitud a través de nuestra página web, explicando que la provisión de mascarillas se redujo a una o dos semanas. Lo que creó conciencia de entregar mascarillas médicas inmediatamente ,” dijo. “La seguridad de aquellos trabajadores de salud en la primera fila es muy importante. Si se sienten protegidos y tienen el equipo adecuado, podrán ayudar a los pacientes que necesiten atención”.
Las entregas se llevaron a cabo el 8 de abril. Ese mismo día, los voluntarios Tzu Chi se encontraban trabajando en el área metropolitana de Inland Empire (centrada en las ciudades de Riverside, San Bernardino y Ontario) recibieron la tarea de realizar entregas a dos hospitales que necesitaban urgentemente mascarillas. James Wu, uno de los voluntarios, dirigió el equipo que se encargaría de esa la tarea. Primero, fueron hacia la Fundación Médica Tzu Chi (TCMF, por sus siglas en inglés) para recoger los suministros. Luego, inmediatamente se comunicaron con los hospitales y hicieron la entrega al dia siguiente.
Wu expresó que al ver las sonrisas de los trabajadores y sentir su gratitud tras realizar la entrega, se dio cuenta de cuánto significa esto para ellos. Y, espera asegurarse de que sepan cuán profundamente los voluntarios Tzu Chi se preocupan por cada uno de estos héroes.
El frío y la lluvia no impedirán que los voluntarios lleven a cabo su misión de apoyar a los trabajadores de salud. Cada uno de ellos han sido testigos de las profundas reservas de compasión y determinación que muestran mientras se encuentran en la primera fila de la pandemia atendiendo a los pacientes.
