Escrito por Yue Ma y Pheel Wang
Traducido (Inglés) por Diana Chang
Traducido (Español) por Hernán Goicochea
Editado por Maribel Suárez
Domingo por la tarde, 20 de junio de 2021, un tornado arrasó el área metropolitana de Chicago, Illinois. Fue el primer gran tornado registrado desde 2015.
El Servicio Nacional de Meteorología, confirmó que el tornado tocó tierra alrededor de las 11:10 PM, cerca de la Ruta 53 y Calle 75 en Woodridge (suburbio ubicado en el suroeste de Chicago). Con vientos de hasta 135 mph (217 km/h) , el evento meteorológico también afectó partes de Naperville, Downers Grove, Darien y Burr Ridge. El tornado destrozó automóviles, arrancó techos de hogares, derribó líneas eléctricas, cortó puertas de garajes, derribó árboles enormes y arrojó escombros que quedaron a miles de pies en el aire. Como resultado, casi 130 viviendas sufrieron daños, seis personas resultaron heridas y solo una gravemente herida. Afortunadamente, no hubo víctimas mortales.
En Darien (otro suburbio ubicado en el suroeste de Chicago), el tornado afectó a la Oficina Regional Tzu Chi del Medio Oeste. A las 11 PM, se cortó la la luz en el Jing Si Hall y no regresó hasta las 2:00 PM del siguiente día. En las calles, se observaba a operadores de maquinarias pesadas y vehículos por todas partes, apresurados a reparar todos los daños que el tornado había dejado a su paso.
Naperville, específicamente el área entre la Comunidad de Ranchview y la 75, resultó ser una de las más afectadas. Es una comunidad poblada por muchos residentes chino-estadounidenses. En una parte del sector de las casas dañadas, una fue arrasada por completo, dejando solo el piso. Muchos residentes del área se acercaron a ayudar a limpiar los escombros.
Estaciones de televisión locales también llegaron al lugar de los hechos, informando sobre una área donde vivían dos personas mayores de edad, que se escondieron en el sótano por seguridad. Afortunadamente, no resultaron heridos y fueron asistidos por bomberos.
Los voluntarios de Tzu chi, Mark Zaremski y su esposa Jing Zhang, viven a unos minutos del Jing Si Hall. Después de que golpeó el tornado, su jardín en buen estado, se había convertido en un desastre, lleno de árboles caídos. Aunque no hubo daños significativos, se debía comenzar la limpieza de escombros.
Agradecemos que este incidente no haya causado ninguna pérdida de vidas. Queremos enviar nuestros más sinceros deseos para que los afectados se recuperen de esta situación lo antes posible.