Tzu Chi entrega ayuda a sobrevivientes de tornado en Houston

Región Sur  |  30 Enero, 2023
Volunteers help tornado survivors
Voluntarios brindando ayuda a los sobrevivientes. Foto/ Jeffrey Lin

Escrito por: Jeffrey Lin
Adaptado al español por: María Pacheco Valles
Editado por: M. Carolina Saheli

El pasado 24 de enero un tornado impactó las ciudades de Pasadena y Deer Park, ambas ubicadas en Houston. Este evento meteorológico dañó aproximadamente 30 viviendas y obligó a cerrar las refinerías, que son fuente de trabajo para miles de personas en estas áreas. Durante el paso del tornado una persona y dos perros resultaron heridos. Ocho días después, el 4 de febrero de 2023, los voluntarios de la región sur de Tzu Chi organizaron una distribución de tarjetas de débito prepagadas y suministros de ayuda. El evento tuvo lugar en el campus de Pasadena de la organización local sin fines de lucro BakerRipley, que se encuentra cerca del área afectada por el tornado. En total 42 familias y 123 personas se beneficiaron con esta distribución. Tzu Chi entregó un total de $24,100 y 62 mantas ecológicas.

Un tornado inesperado

El 24 de enero de 2023, se declaró una alerta de tornado en Houston, lo que es inusual durante la temporada de invierno. Cuando el equipo de la oficina de la región sur de Tzu Chi, escuchó sobre este evento meteorológico, empezaron a preocuparse por todas aquellas personas que se verían afectadas por el impacto del tornado. 

A medida que llegaron los informes de los medios de comunicación y se conoció el alcance de los daños, la preocupación de los voluntarios por las comunidades afectadas solo aumentó. Por eso, decidieron ir a las zonas afectadas por el tornado para conocer de cerca la situación y ayudar a los sobrevivientes.

Entre el 28 y 29 de enero, un equipo de voluntarios de la Región Sur de Tzu Chi visitó el Centro de Recuperación y Asistencia por Desastre, creado por las autoridades de Pasadena y Deer Park. El equipo del Centro de Recuperación registró a los sobrevivientes que recibieron la ayuda de emergencia de la fundación budista. 

Agradecidos por la ayuda

A pesar de las bajas temperaturas en la mañana del 4 de febrero, los voluntarios se reunieron en la casa club de la Región Sur de Tzu Chi. Empacaron todos los suministros, mantas y materiales de instalación que serían usados en la distribución y partieron al área afectada por el tornado.  Los voluntarios se preparan para dar una cálida bienvenida a los sobrevivientes y demostrarles que estaban allí para ayudarlos. Cada uno de los regalos dados a los sobrevivientes estaba acompañado por una carta con las bendiciones de la Maestra Cheng Yen, mostrando el afecto de Tzu Chi por los afectados por el tornado. 

Antes de que empezara el evento, muchas familias afectadas esperaban en la entrada. La voluntaria Hua Yin Lin, entregó las alcancías de bambú de Tzu Chi y explicó que los fondos utilizados para ayudarlos en ese momento se tomaron de las donaciones hechas en las alcancías de bambú por otras personas alrededor del mundo. 

La carta escrita por la Maestra Cheng Yen les hizo saber y sentir a las familias afectadas que, aunque pasan por un momento difícil, no están solas. Tzu Chi se encargó de demostrar que otras personas estaban allí para ayudarlos a superar este momento. Los voluntarios también motivaron a las personas que esperaban en la fila a cantar juntos la canción “Una familia” en lenguaje de señas, esparciendo así compasión y amor en los corazones de todos. Los voluntarios de Tzu Chi trabajaron juntos, como una gran familia.

Ayudar en momentos de emergencia, en tiempo real es algo que no puede hacer una sola persona, sino que debe hacerse reuniendo el poder de todas las personas.

Según el director ejecutivo de la Región Sur de Tzu Chi, Sean Lo, “Tzu y Chi significa ‘compasión y alivio’, los voluntarios de Tzu Chi combinan el amor de todos los seres humanos para ayudar a los que sufren y logran que todas las familias afectadas se unan en un sólo sentimiento”.

El mundo puede llenarse de luz con la ayuda de todos

Bryan Fought, uno de los sobrevivientes del tornado, no dudó en mostrar su agradecimiento. “Estoy agradecido de estar con los voluntarios de Tzu Chi, y estoy profundamente agradecido por la ayuda que ha brindado. Aunque puede ser un largo camino hacia la reconstrucción, la gente puede comenzar a ir a la escuela y trabajar mientras limpiamos y restauramos. Es una gran tarea y proyecto, pero estoy seguro de que podemos reanudar nuestras vidas normales. Con la ayuda del gobierno y organizaciones como Tzu Chi, así como al combinar los esfuerzos de todos, lograremos que se recuperen lo antes posible. Al mismo tiempo, un desastre inesperado como este nos hace pensar en el valor de cada persona y lo que cada uno puede dar al mundo y a la sociedad”, comentó Fought.

El poder de una persona es demasiado pequeño para lograrlo todo. Necesitamos reunir el poder de todos para lograrlo juntos, al igual que organizaciones como Tzu Chi y las alcancías de bambú, un gran poder es la reunión de cada pequeño aporte de esfuerzos.

Una sobreviviente de apellido Hernández agradeció a Tzu Chi por la ayuda brindada a las personas afectadas por el tornado. “La disposición y el apoyo de Tzu Chi ha sido importante. Nos tratan como familia. En el futuro me gustaría ser voluntaria”, comentó. 

Por su parte otro de los sobrevivientes de nombre Hawkins compartió su historia con los voluntarios. Dijo que los vientos empezaron a azotar su casa mientras preparaba la cena, luego las luces se apagaron y cerró todas las puertas y ventanas de su casa y corrió junto a sus hijos a refugiarse en una habitación más segura. Cuando pasó el tornado, vio que las ventanas estaban rotas, los artículos del hogar estaban esparcidos por el piso y el balcón estaba hecho un desastre. A pesar de ello, agradeció a Dios por cuidar a su familia y hacer posible que sobrevivieran.

Después del desastre, las familias afectadas y los voluntarios fueron testigos y protagonistas de cómo la ayuda mutua y el amor comunitario pueden reunir recursos humanos, financieros y emocionales para beneficiar a los necesitados. Este evento ayudó a los sobrevivientes a recuperar su confianza e hizo que todos se sintieran llenos de amor y recordaran que hay amor en el mundo. Hawkins, uno de los sobrevivientes dijo: “Creo que con todo lo que todos nos han dado, podemos superar este tornado y volver a ponernos de pie muy pronto”.

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