Escrito por Weiling Wang
Adaptado al español por María Pacheco Valles
Editado por Maribel Suárez
Durante los días previos a la Navidad de 2021, el oeste y sur de Estados Unidos sufrieron las consecuencias de uno de los peores tornados registrados en este territorio. El Servicio Nacional Meteorológico contabilizó más de 50 tornados que se formaron durante el 10 y 11 de diciembre. Este fenómeno natural devastó ciudades enteras y más de 80 personas perdieron sus vidas. mientras los sobrevivientes quedaron en estado de vulnerabilidad.
Fueron miles de habitantes que resultaron afectados por esta tragedia, miles que perdieron todo por lo que habían luchado se convirtieron en damnificados. Uno de los estados en el que se registraron grandes daños y pérdidas fue Kentucky, específicamente la ciudad de Mayfield. Allí un edificio entero colapsó sobre los empleados, zonas residenciales se convirtieron en escombros. En esa ciudad del oeste vive una de las comunidades más vulnerables del país: los amish quienes mantienen normas sociales distintas a los de la mayoría y defienden un estilo de convivencia conectado sencillo, sin las comodidades actuales y alejado de la tecnología.
Durante el impacto de estos tornados, la comunidad se vio seriamente afectada, pero no se movieron de su asentamiento para buscar ayuda. Sin embargo, mientras los voluntarios de Tzu Chi estaban en Mayfield preparando la distribución de suministros de emergencia, James Stovall —residente de Mayfield y quien conocía sobre la situación de los amish—les comentó lo sucedido a los representantes de la Fundación budista y estos no dudaron un segundo en ir hasta el asentamiento para ofrecerles un poco de alivio tras el desastre.
Al llegar a la comunidad, los representantes de Tzu Chi fueron recibidos amablemente por parte de los amish, los hombres vestían ropas oscuras y sombreros, mientras que las mujeres cubrían sus cabellos y usaban delantal. Esto siguiendo las reglas de vestimenta de la comunidad: sus prendas de ropa siguen los patrones del siglo XIX. Los voluntarios también se encontraron con carruajes tirados por caballos y pequeñas casas sin electricidad, donde llevan una vida sencilla, alejados de las distracciones modernas. El asentamiento visitado en Mayfield, forma parte de La Vieja Orden Menonita de la Iglesia Cristiana Protestante.
Los amish no manejan vehículos, usan como medio de transporte carruajes tirados por caballos. Foto/ Yue Ma.
En este lugar el paso del tornado dejó destrucción y muerte. Los fuertes vientos registrados despedazaron un pequeño trailer donde vivía una pareja de jóvenes amish junto a sus cinco hijos. En la emergencia, los integrantes de la comunidad empezaron a buscar entre los restos del tráiler y escucharon el llanto de unos niños; milagrosamente, encontraron a tres de los hermanos. No obstante,los padres y los otros dos hermanos estaban en lugares diferentes y fueron hallados sin signos de vida. Los tres niños sobrevivientes fueron adoptados por familiares.
Los voluntarios de Tzu Chi visitaron a todas los hogares pertenecientes a esta comunidad amish y, personalmente hicieron entrega de paquetes de ayuda de emergencia. Fueron donados artículos que podrían ayudar a estas personas a tener un poco de esperanza después del dolor. Todo fue recibido amablemente por los afectados. Además, los amish recibieron mantas y bufandas ecológicas, así como tarjetas de débito prepagadas con USD$1,000 y que pueden ser usadas para todo lo que necesiten. También recibieron alcancías de bambú, donde pueden recolectar un poco de dinero para luego dárselo a otras personas que lo requieran.
A pesar de las diferencias que puedan existir, la visita a esta comunidad amish demostró a los integrantes de Tzu Chi que comparten valores como la humildad y el seguir un estilo de vida sencillo, conectado con lo que realmente importa.
Gracias por los libros de texto y esperamos leerlos cuando la escuela termine la construcción.
Voluntarios de Tzu Chi en San Luis, Missouri, acompañados de otros voluntarios de la Región del Medio Oeste, se trasladaron hasta la zona de desastre en Defiance, ciudad de San Luis y también viajaron a la remota ciudad de Hayti para hacer donaciones a los damnificados. Foto: Wenzhen Wu.
