Adaptado al español por María Pacheco
Editado por M. Carolina Saheli
En la última IX Cumbre Anual de las Américas, evento que se realiza cada tres años, se reunieron 35 líderes nacionales del continente americano desde Alaska en el hemisferio Norte hasta Tierra del Fuego en el hemisferio Sur, incluidos representantes de la Unión Europea, así como de otras organizaciones y grupos que se enfocan en la política, economía, medios de vida y otros temas de sus respectivas naciones. Este grupo de personas se reunió en Los Ángeles, California, del 6 al 10 de junio para participar en esta cumbre sobre el desarrollo en las Américas en la era post-pandemia.
Además los líderes de los grupos religiosos de las Américas aprovecharon la oportunidad para albergar el Segundo Foro Interreligioso de las Américas durante los días 7 y 8 de junio en el Centro de Plaza Catedral que se encuentra en las inmediaciones de la Cumbre, para mostrar al mundo cómo una fe fuerte puede ayudar a construir un futuro sostenible, resiliente y equitativo para las Américas.
El Foro Interreligioso de las Américas reunió cerca de 80 líderes religiosos, quienes pronunciaron sus discursos durante estos días. Los representantes del Cristianismo, el Catolicismo, el Judaísmo, el Budismo y otras religiones, basándose en sus enseñanzas religiosas y filosóficas, explicaron cómo la fe religiosa puede ayudar a los países y comunidades del continente Americano conseguir, mejorar y abordar temas importantes como la democracia, la inclusión, la protección de los derechos humanos, la lucha contra la corrupción, la mejora de la inmigración y la pobreza.
Tzu Chi fue la única organización budista invitada a hablar en la clausura de este foro, Debra Boudreaux, directora general de Tzu Chi USA, pronunció un discurso en nombre de Tzu Chi, habló sobre la filosofía de la Maestra Cheng Yen, fundadora de Tzu Chi, y el viaje de la fundación en el campo internacional de la caridad y la compasión. También destacó los esfuerzos de Tzu Chi en combatir el cambio climático global y el progreso de su proyecto en curso para ayudar a los refugiados de Ucrania en Europa.
“Continuamos compartiendo el verdadero enfoque de acción de Tzu Chi en varias cumbres y foros. Lo más importante, es liderar y dar a conocer la educación y la filosofía de Tzu Chi sobre la alimentación, ropa, vivienda y transporte”, comentó Debra Boudreaux, además agregó que “lo más importante en este momento es empezar desde adentro, es por eso que la Maestra Cheng Yen nos llamó a arrepentirnos y ser agradecidos con la Madre Tierra, tener un corazón y una mente agradecida. Tzu Chi defiende la humanidad como fuerza impulsora de la fe”.
Como la única organización budista invitada a participar en el Foro Interreligioso de las Américas, la dedicación y el compromiso de Tzu Chi ha sido reconocido por todos. Entonces, estamos agradecidos por la resonancia del amor y el llamado al bien que hemos recibido aquí.
Según Masahiro Nemoto, secretario general adjunto de Religions for Peace, esta importante cumbre aborda temas de interés para toda la humanidad y tiene como objetivo informar a los responsables políticos sobre las preocupaciones de los líderes religiosos y las creencias de la comunidad interreligiosa sobre los derechos humanos, la justicia y otros valores importantes en la vida.
“Ya sea que se aborde un problema o desafío global, todos estos temas son de preocupación e importancia para la Cumbre Interreligiosa del G20, y buscamos ofrecer nuestro consejo a los líderes de la Cumbre aquí”, dijo Audrey E. Kitagawa, presidenta de la Junta de Síndicos del Parlamento de las Religiones del Mundo. También agregó que “la humanidad enfrenta desafíos sin precedentes como graves problemas de pobreza, hambre y educación causados por conflictos provocados por el hombre. Es hora de hacer algo más que rezar por la paz”.
Kitagawa considera a Tzu Chi como un modelo a seguir para muchas organizaciones religiosas por su capacidad de responder rápidamente a muchos desastres.
Por su parte el reverendo Alexei Smith, Reverendísimo Oficial Interreligioso Ecuménico de la Arquidiócesis de Los Ángeles, quien ha trabajado durante mucho tiempo con Tzu Chi en proyectos de servicio comunitario interreligioso, dijo “quiero ver un futuro en el que todos trabajen juntos. Nadie debería estar aislado o en una lucha solitaria. Toda la humanidad debería trabajar en unión. Somos igualmente humanos, y todos necesitamos ser tratados con respeto y dignidad, debemos poder satisfacer las necesidades humanas básicas que no tienen nada que ver con creencias religiosas o culturales tradiciones. Podemos trabajar juntos para aliviar el sufrimiento del mundo”.
Vale destacar que el Foro Interreligioso de las Américas está patrocinado por Religions for Peace, LACCRL, G20 Interfaith Forum Association, Berkley Center for Religion, World Affairs at Georgetown University), ICLRS e ICSoCal.
