Escrito por Kitty Lu
Adaptado al español por María Pacheco
Editado por M. Carolina Saheli
Por segundo año consecutivo, Tzu Chi fue invitada a participar en el Día Nacional de Oración, en el condado de Alameda, California. Los organizadores del evento también invitaron a líderes de diferentes grupos religiosos a orar juntos por los Estados Unidos, la humanidad y el mundo, en armonía interreligiosa.
Tzu Chi interpreta canción en lenguaje de seña
En los Estados Unidos, y en otras partes del mundo, las personas han estado sintiendo los efectos del calentamiento global, el cambio climático y los desastres naturales en los últimos años. Tragedias como tiroteos masivos también han impactado y dañado a comunidades en muchos estados. La Maestra Cheng Yen ha enfatizado constantemente la necesidad de elevar oraciones sinceras y la práctica del vegetarianismo. Por lo tanto, este evento tuvo un significado especial para Tzu Chi, así como para los miembros de muchas religiones. Los voluntarios de Tzu Chi que participaron se enorgullecieron de interpretar canciones en lenguaje de señas para orar por los Estados Unidos y el mundo.
Desde las primeras horas de la mañana del 4 de mayo, voluntarios de la Región Noroeste de Tzu Chi viajaron desde las ciudades de Fremont y Pleasanton para apoyar el evento. Cuando llegaron, aprovecharon el tiempo para practicar las canciones y oraciones que iban a interpretar, con la esperanza de traer una experiencia llena de paz y refrescante al evento.
David Haubert, supervisor del condado de Alameda, quien organizó el evento, dijo: “El Día Nacional de Oración fue promulgado por el Congreso de los Estados Unidos en 1952, y ha sido un día de oración para la nación desde su inicio cada año. Se espera que este día pueda unir a la nación en oración y reflexión”.
Unidos en oración
Mientras que Minjhing Hsieh, director ejecutivo de la región noroeste de Tzu Chi, dijo: “Estados Unidos es una sociedad muy diversa, con una variedad de religiones diferentes. Aprovechamos esta oportunidad para interactuar con varias religiones y expresar el espíritu de integración religiosa para que Tzu Chi pueda orar por la paz mundial junto con tantas religiones diferentes ¡Lo encontramos muy significativo!”.
Al comienzo de la oración, los líderes del cristianismo, el catolicismo, la ortodoxia oriental, el islam, el judaísmo, el hinduismo, el budismo y otras religiones subieron al escenario para guiar a las personas en la oración en su propia forma de fe.
El sacerdote ortodoxo oriental, expresó: “Damos gracias al Señor porque todos podemos estar juntos en los Estados Unidos”. Y los representantes hindúes, vestidos con trajes tradicionales, cantaron “Paz” en su idioma nativo. Sembrando un ambiente lleno de luz y tranquilidad.
Alá por favor guíanos a trabajar juntos en armonía en lugar de dividirnos con el individualismo. Oramos para que los líderes mundiales lideren con compasión y sabiduría, y trabajen por la paz mundial y la humanidad.
La Maestra de Dharma del Templo Fa Yun Chan en Oakland, dirigió al público en oración. “Gracias al territorio de los Estados Unidos que proporciona una gran plataforma para que los diferentes pueblos, religiones y culturas del mundo sean libres, autónomos, iguales, y compartidos. Más importante aún, trabajaremos juntos para mantener la armonía social y la paz para la humanidad a través de las excelentes tradiciones de todos los pueblos y el espíritu bodhisattva de apoyo interreligioso, compasivo y sabio”.
Conmovedora interpretación
A diferencia de otras organizaciones, los voluntarios de Tzu Chi, dirigidos por el director ejecutivo de la región noroeste de Tzu Chi, Minjhing Hsieh, no leyeron una oración, sino que bajaron lentamente los escalones al ritmo de la música, se formaron e interpretaron “Amor y cuidado para todos”, en lenguaje de señas para orar por Estados Unidos. Los asistentes sacaron sus celulares para grabar esta hermosa escena.
Fueron muchos los voluntarios que vinieron a participar, para cantar “Amor y Cuidado”, creo que la audiencia sintió la energía pacífica y positiva.
Eileen Chen, voluntaria de Tzu Chi, compartió su experiencia durante el evento, “Realmente hay mucho sufrimiento en el mundo, los refugiados de la guerra son desplazados sin poder hacer nada. Esperamos que el amor pueda transmitirse a través de la canción “Amor y Cuidado” , y así ayudar a calmar a las personas. Me conmovió mucho asistir a esta oración porque vi a todos los grupos religiosos orando, no solo por nuestro país sino por el mundo entero”.
Por otro lado, Sherry Wang, voluntaria de Tzu Chi, dijo: “Fue muy conmovedor ver a personas de diferentes religiones orando por la paz mundial y la paz mental. Después de todo, la religión es la mejor manera de calmar el corazón”.
Después de la oración, muchas personas se acercaron a los voluntarios para preguntárles a qué organización pertenecían y con la esperanza de tener la oportunidad de conocer más sobre Tzu Chi. Aunque las personas son de diferentes religiones, etnias e idiomas, el amor es universal y trasciende todas las barreras.
