Escrito por Penny Liu
Traducido por Gerardo Bonilla
Edited by Adriana DiBenedetto
Cuando la pandemia de COVID-19 comenzó a tener arraigo en los Estados Unidos, los voluntarios de Tzu Chi tuvieron que suspender sus visitas, a los residentes de Wharton con quienes habíamos desarrollado una amistad durante nuestros esfuerzos de ayuda a largo plazo, por el huracán Harvey. Sin embargo, a pesar de la distancia y gracias al arduo trabajo de una voluntaria local llamada, Barbie Fortenberry, pudimos recibir noticias y actualizaciones sobre el bienestar de todos.
La Región Sur de Tzu Chi había estado proporcionando útiles escolares a los estudiantes de bajos ingresos de Wharton desde 2018, luego de que el huracán Harvey afectó fuertemente a estas familias. A finales de julio, los voluntarios se pusieron en contacto con Barbie para preparar una lista de estudiantes de primer grado hasta duodécimo grado en donde se incluyeron 101 alumnos que necesitaban útiles escolares. Después de haber estado ausente de las vidas de estos estudiantes por varios meses, los voluntarios determinaron que esto era algo que se podía realizar en persona. Fue entonces que Julienne Chi y Penny Liu pasaron varios días navegando por Internet y comprando en diferentes Walmart y tiendas de un dólar para obtener todos los artículos necesarios en las listas de útiles escolares. Luego, el 11 de agosto, nueve voluntarios fueron a la oficina de Tzu Chi en Houston para empacar cuidadosamente los útiles para cada estudiante. Los voluntarios no solo empacaron útiles escolares, también paquetes de comidas en las que incluyeron dos bolsas de fideos Jing Si, y dos paquetes de arroz instantáneo Jing Si, para las familias de los niños. Esto con la esperanza de que puedan tener una comida vegetariana nutritiva en estos momentos tan difíciles. Los paquetes también incluían una mascarilla de tela para niños hecha por un voluntario vietnamita, un Tzu Chi Journal, una alcancía de bambú y un folleto de Aforismos Jing Si para levantar el ánimo en sus corazones.
En la mañana del 13 de agosto, cuatro voluntarios, Julienne Chi, Penny Liu, Peter Luong y la Dra. Chingyun Suen, partieron de la oficina de Tzu Chi. Fue así que una furgoneta llena de útiles escolares y paquetes de cuidados, conducida por Xue BIn, se dirigió hacia la casa de Tzu Chi en Wharton localizado en las facilidades de Just Do It Now (Organización Religiosa Sin Fines de Lucro). Los voluntarios también trajeron 800 mascarillas de tela azul Tzu Chi para donar a los maestros del Distrito Escolar Independiente de Wharton (Wharton ISD).
A las 9:15 AM, los voluntarios llegaron al gimnasio Just Do It Now. Barbie nos saludó en la puerta y los voluntarios comenzaron a descargar. A las 10:00 de la mañana, el superintendente de Wharton ISD, el Dr. Michael O’Guin, llegó en compañía de los miembros de su personal, Bridget English y Linda Lins. Luego Barbie y Julienne presentaron lo que es Tzu Chi, y describieron el programa Tzu Chi Happy Campus (Campus Feliz en inglés), que habíamos implementado en otras escuelas. El Dr. O’Guin agradeció las 800 mascarillas de tela y expresó interés en proyectos futuros. Esperamos tener la oportunidad de trabajar con las escuelas de Wharton ISD para brindar más servicios en la comunidad local.
Los voluntarios comenzaron rápidamente la distribución de útiles escolares. Debido a la pandemia, los voluntarios no pudieron reunir a los estudiantes en el gimnasio. Debido a esto contactamos a los estudiantes o sus padres, para que asistieran en diferentes horarios. De esta forma lograríamos limitar la cantidad de personas reunidas al mismo tiempo.. Durante la repartición conocimos a varios de los beneficiarios de las ayudas que ofrecimos para la recuperación a largo plazo del huracán Harvey. Los voluntarios, se enteraron de que la hija de un beneficiario había fallecido recientemente después de una larga batalla, por las graves heridas sufridas en un accidente automovilístico. Esta mujer lloró cuando los voluntarios preguntaron cómo se encontraba. Luego nos dijo que no había podido trabajar tiempo completo debía cuidar a su hija después del accidente. Ahora, debido a la pandemia, no puede trabajar. Sin embargo, nuestra asistencia regular durante los últimos meses la había ayudado enormemente. Estamos agradecidos por su gratitud y esperamos que ella también algún día pueda recuperarse de la triste pérdida de su hija.
Durante la distribución, encontramos a una abuela, que vino a recoger suministros para sus nietos. La señora también es una de nuestras beneficiarias de los cuidados a largo plazo por lo que estuvo encantada de vernos. También nos confesó, que su casa finalmente estaba siendo reparada. Mientras, el padre de Barbie y su hija, Laura, también vinieron para expresar cuánto apreciaban el trabajo de Tzu Chi en Wharton.
Más adelante, un conductor de un automóvil que pasaba por el gimnasio JDIN (Just Do It Now) vio a Julienne afuera y se detuvo para preguntar si teníamos alcancías de bambú para brindarle. Esto hizo que los voluntarios se dieran cuenta de que las semillas de amor que habían sembrado en esta comunidad después del huracán Harvey habían crecido. De hecho, haremos todo lo posible para continuar con el esfuerzo.
Los voluntarios de Tzu Chi continuarán apoyando y empoderando a las comunidades a las que servimos durante la pandemia. Usted puede respaldarnos, mientras ayudamos a familias con dificultades en todo el país. Estamos convocando a 500.000 donantes, para ayudarnos a recaudar USD$5 millones en donaciones caritativas. Cada dólar cuenta, y en estos tiempos difíciles, su desinteresada donación de USD$10.00 puede ayudarnos a brindar esperanza a aquellos, que no pueden alimentar a sus familias. Su aportación nos ayudará también a proporcionar Equipo de Protección Personal (EPP) esencial a las personas que se encuentran en primera línea de riesgo. Si podemos inspirar a 500.000 personas a participar, ¡podemos alcanzar los USD$5.000.000 de ayuda!
