Escrito por Jennifer Chien
Traducido y adaptado al español por Gabriela Barzallo
Editado por M. Carolina Saheli
El 24 de febrero de 2022, el ejército ruso invadió Ucrania. Esta guerra, la mayor desde el comienzo del siglo XXI, ha desplazado a más de ocho millones de familias ucranianas y ha afectado la economía, alimentación, agricultura, energía y seguridad regional de países de todo el mundo.
Representantes de dos organizaciones internacionales que firmaron un Memorando de Entendimiento con Tzu Chi el año pasado para realizar un esfuerzo conjunto de ayuda humanitaria a los ucranianos, IsraAid y ADRA Internacional (Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales), se reunieron por primera vez con Debra Boudreaux, directora general de Tzu Chi USA, el 24 de febrero de 2023. La fecha marcaba el primer aniversario de la guerra entre Rusia y Ucrania. Intercambiaron su experiencias al brindar ayuda de emergencia internacional y hablaron de la ayuda actual por la catástrofe del terremoto en Turquía.
En este momento, cuando nos acercamos al primer aniversario de la guerra entre Ucrania y Rusia, todo el mundo ha reflexionado sobre la guerra y, sin embargo, sabemos que el amor duradero entre las personas es para siempre.
Tras el estallido de la guerra ruso-ucraniana, Tzu Chi lanzó una misión internacional de ayuda humanitaria. A 100 días del inicio del conflicto, la fundación estableció colaboraciones con 11 organizaciones internacionales, entre ellas UNICEF, IsraAID, ADRA (Agencia Adventista de Desarrollo y Ayuda), Airlink y CADIS (Servicio Internacional para Catástrofes), a través de un Memorando de Entendimiento (MoU, por sus siglas en inglés),
Los memorándums combinan el poder de las organizaciones benéficas con gran experiencia y recursos que trabajan juntas en esfuerzos de ayuda interreligiosa y transfronteriza. Su objetivo de colaboración es atender a los ucranianos desplazados de la forma más oportuna y completa mediante un modelo armonioso y de asistencia mutua.
Reconstruir viviendas pensando en la protección del medio ambiente
Mientras daba la bienvenida a los representantes de ADRA e IsraAID, la directora general de Tzu Chi USA, Debra Boudreaux, junto con sus colegas del Departamento de Asuntos de Asociaciones Globales y del Departamento de Desarrollo Benéfico, presentó brevemente las intenciones de la Maestra Cheng Yen al fundar Tzu Chi, el concepto y el proceso de producción de los productos ecológicos de la tecnología DA.AI, y los proyectos de ayuda de Tzu Chi en África y otros países. El itinerario de los distinguidos invitados también dejó tiempo para visitar el campus de la sede nacional de Tzu Chi USA en San Dimas.
En respuesta al llamamiento de la maestra Cheng Yen a “proteger el medio ambiente con nuestras palmas”, los voluntarios de Tzu Chi han puesto en marcha programas de reciclaje en todo el mundo. Gracias a las actividades de los voluntarios que recogen botellas de plástico PET para reciclarlas y a la integración de los fabricantes de textiles anteriores, intermedios y posteriores, Tzu Chi ha desarrollado conjuntamente un proceso profesional. El objetivo es fabricar productos ecológicos con tecnología DA.AI y lograr realmente la misión de cero residuos de “convertir la basura en oro, el oro en amor, el amor en agua limpia, y difundirlo por todo el mundo”, como se afirma en la visión y los planes medioambientales globales de Tzu Chi.
Durante la sesión informativa para los representantes de los socios de honor, Boudreaux presentó las mantas ecológicas, tiendas de campaña, muebles multiusos, ladrillos ecológicos y otros productos de Tzu Chi. También explicó con énfasis que Tzu Chi utiliza la microfibra de protección medioambiental DA.AI y otros productos, combinados con cursos de costura, para guiar a las mujeres de las aldeas de África Oriental en la producción y venta de compresas higiénicas ecológicas, en un intento de resolver los problemas económicos de las mujeres africanas y capacitarlas para que se conviertan en el sostén de sus hogares.
Debra Boudreaux brevemente recalcó las razones del porqué de la visita de los socios: Esta vez, entre los visitantes invitados, estuvieron el interlocutor de la comunidad en Kiev, Ucrania, el jefe de la bodega localizada en Rumania, y el representante de primera línea. Compartieron experiencias sobre su trabajo actual, como el ayudar a la gente que sufre ataques aéreos en Ucrania, brindar atención médica a corto y largo plazo, coordinar suministros de ayuda para su distribución en diferentes áreas de refugio, o gestionar la logística para que los suministros de ayuda lleguen a Ucrania. Todos son socios importantes de Tzu Chi, ya que gracias a sus esfuerzos, los suministros y el cuidado de Tzu Chi llegarán a quienes más lo necesitan.
La guerra es efímera, y la ayuda a corto y largo plazo debe tener como objetivo capacitar a los residentes de la comunidad local. Usando el concepto de protección medioambiental de la Maestra Cheng Yen, las casas destruidas pueden reorganizarse mediante ladrillos reciclados y tejas clasificadas con ambas manos.
Los productos ecológicos de Tzu Chi causan una gran impresión
Yotam Polizer, director general de IsraAID, viajó recientemente a Taiwán para conocer y mostrar su respeto a la Maestra Cheng Yen. Visitó la sede nacional de Tzu Chi USA junto a Alena Druzhynina, Jefa de Operaciones de la misión de IsraAID en Ucrania, y Valerio Carafa, Oficial de Operaciones de Emergencia de la sede central de IsraAid. Carafa también dirige el equipo de IsraAID en Rumanía, donde han establecido un centro logístico humanitario en la frontera con Ucrania.
“Tzu Chi ha sido un socio increíble para IsraAid. Conocí a Tzu Chi en muchas zonas catastróficas de todo el mundo, y ahora colaboramos en Ucrania, Moldavia y Rumanía proporcionando ayuda inmediata con sus suministros, y apoyo psicosocial a cientos de miles de personas”, declaró Polizer durante la visita.
Tuvimos el privilegio de acoger al equipo y a los voluntarios de Tzu Chi en mayo, y desde entonces, hemos forjado una magnífica alianza que durará muchos años, porque la recuperación a largo plazo tomará años, desafortunadamente. También estamos muy contentos de colaborar ahora con Tzu Chi y que nuestros equipos estén juntos en el terreno en Turquía, tras el terremoto que mató a más de 45.000 personas. Deseamos desarrollar esa asociación y ayudar a más personas en las zonas afectadas.
Druzhynina mencionó que muchas familias ucranianas abandonaron el país en busca de seguridad al inicio de la guerra. Ella también se marchó con su hija a un lugar seguro. Sin embargo, Druzhynina y su hija regresaron a su patria al cabo de tres meses y vieron el impacto de la guerra, que nadie esperaba que ocurriera. “La guerra afecta mucho a todos los ucranianos, incluidos mi familia y yo. La vida en Kiev no es fácil. Tenemos cortes de electricidad todo el tiempo, ataques con cohetes, ataques de drones. Tenemos que pasar gran parte del tiempo en los refugios antiaéreos”, explicó.
Como Jefa de Operaciones de la misión de IsraAID en Ucrania, Druzhynina describió lo que está haciendo IsraAID, que incluye apoyo psicosocial y de salud mental, talleres de formación, adquisición de estaciones para suministrar agua potable a la población, apoyo a clínicas móviles e instalaciones sanitarias, y suministro de generadores, calefactores, ropa de abrigo y mantas para la invernada y más.
Todo lo que hacemos no sería posible sin el apoyo de la Fundación [Budista] Tzu Chi. Estamos muy agradecidos por esta oportunidad. Además de proporcionar ayuda directa e inmediata, también se trata de tener un impacto a largo plazo e invertir en la sostenibilidad de la comunidad.
Valerio Carafa, jefe del equipo de IsraAID en Rumanía, también habló de la colaboración de Tzu Chi con IsraAID: “Tzu Chi ha sido un socio excelente para IsraAID durante la respuesta ucraniana. En Rumanía, donde tenemos un centro logístico, nos visitaron. Durante este tiempo, Tzu Chi también ha proporcionado suministros de alimentos:
La Fundación [Budista] Tzu Chi nos ha enviado artículos de alta calidad, por ejemplo artículos de invierno como edredones. Han proporcionado botiquines de primeros auxilios para distribuir en las primeras líneas del conflicto.
Asimismo, Carafa habló de su experiencia en el campus de la sede nacional de Tzu Chi USA. Dijo que tuvo una experiencia maravillosa en este lugar; que fue una sensación de paz increíblemente apacible y difícil de describir. Además de quedar impresionado por la producción de artículos ecológicos que benefician a las personas necesitadas, apreció aprender sobre las creencias básicas de compasión de Tzu Chi.
Los socios de la ayuda internacional unen sus fuerzas ante la última emergencia
El director de Asociaciones Sociales y Corporativas Globales de ADRA Internacional, Alex Balint, fue uno de los primeros cooperantes internacionales destacados en Rumanía durante el estallido de la guerra entre Rusia y Ucrania para prestar ayuda a los refugiados. Después de que millones de ucranianos llegaran a los países vecinos en un corto período de tiempo, así como civiles de vuelta a Ucrania, él sabe de primera mano lo difícil y arduo que fue ayudarles.
Recuerda con gran aprecio el momento en que Tzu Chi se involucró: “Cuando regresé de Ucrania tras mi despliegue, nos involucramos con la Fundación [Budista] Tzu Chi a través de Airlink”. Me gustaría agradecerles su colaboración. Hemos estado suministrando equipos médicos a Ucrania junto con otros socios, y ha sido una colaboración muy fructífera basada en alianzas. Gracias por ello”.
Tras los recientes terremotos en Turquía y Siria, los retos en materia de ayuda vuelven a ser enormes. Balint dijo “estuve allí al día siguiente del terremoto, movilizando la ayuda, y a veces, ya sabes, lo que se necesita con más urgencia son tiendas, mantas y otros suministros”. No se podían comprar; había que traerlos por avión desde otros países”. Es necesario un esfuerzo concertado en Turquía y Siria, y expresó su deseo de colaborar con Tzu Chi en este y en otras misiones.
Hemos hablado con su equipo sobre la movilización y el refuerzo de la respuesta en Turquía y Siria, y nos gustaría trabajar con la Fundación [Budista] Tzu Chi en cualquier emergencia: sea en Turquía, Siria o cualquier otro lugar.
Así, mientras los socios recordaban sus esfuerzos pasados y presentes en favor de los ucranianos que sufren en su patria, también pudieron elaborar estrategias sobre las necesidades tras la crisis humanitaria más reciente, la de quienes han salido de las ruinas de hogares y barrios destruidos por terremotos en Turquía y Siria. Es otro viaje desgarrador para ellos. Sin embargo, gracias a su amor y apoyo, Tzu Chi puede seguir ayudándoles.
