Las necesidades médicas de muchas personas en Ecuador son grandes, ya que muchos son desfavorecidos y no tienen los medios, para buscar atención por su cuenta. Por eso, los voluntarios médicos de Tzu Chi continúan viajando de un pueblo a otro con el fin de proporcionar ayuda. Después de brindar tratamiento en Canoa, se dirigieron a Portoviejo para continuar con su misión.
Los voluntarios ofrecieron atención en forma de acupuntura, odontología, medicina general y occidental. Para Tyrone Yu, un acupunturista voluntario, era la primera vez que visitaba Ecuador.
Nosotros usamos la acupuntura para resolver sus problemas, los ayudamos a eliminar el dolor.
Yu, junto a otros acupunturistas voluntarios, atendieron a varios pacientes. En particular, a dos hombres que sufrían de dolores severos. El primero, un hombre discapacitado con dificultades para caminar, y el segundo, con severo dolor en la espalda. Ambos hombres recibieron sesiones de acupuntura sintiendo mejoría a su dolor.
Los residentes quienes estuvieron presentes durante la campaña se sintieron contentos de recibir atención de manera compasiva. Para Erodita Briones, quien estaba allí junto a su madre, la experiencia fue muy agradable sintiéndose muy agradecida con los voluntarios al poder recibir las medicinas necesarias, ya que ambas sufren de diabetes y de presión alta. Luzmila Macías, al igual que Erodita, también demostró su satisfacción de recibir un excelente servicio médico.
No solo los residentes, sino también aquellos voluntarios médicos se sintieron contentos de haber podido realizar el viaje a Ecuador y asistir a los pacientes más necesitados.
Tzu Chi está dejando un legado enorme. Cuando te ayudan, lo hacen de corazón, y llegaron en nuestro momento más difícil. Eso es algo que nunca olvidarás.
La Fundación Tzu Chi, se comunicó con los directivos de la Universidad San Gregorio de Portoviejo, para colaborar juntos y proporcionar atención médica a los residentes que locales desfavorecidos. Uno de los Pilares Fundamentales de Tzu Chi es el trabajo humanitario, encaja perfectamente con los estudiantes universitarios, ya que disfrutan ayudar a los más desfavorecidos.
Los estudiantes, profesores, y los líderes de la universidad comprenden la misión y la compasión de Tzu Chi, porque ellos mismos recorren en el mismo camino de ayudar a quienes más lo necesiten. Todo esto forma parte de los principios de la Gran Maestra Cheng Yen: ayudar y directamente aliviar el sufrimiento de otros.
Tenemos un servicio donde brindamos mucho amor. Somos como una familia. La odontología es amor.
Los estudiantes, sus profesores y los líderes de la universidad comprenden la misión y la compasión de Tzu Chi, porque ellos mismos recorren el mismo camino de ayudar a quienes más lo necesiten. Todo esto forma parte de los principios de la Gran Maestra Cheng Yen: ayudar y directamente aliviar el sufrimiento de otros.
Desde su arribo Tzu Chi, está aprende. Los voluntarios entablan una buena relación con las comunidades más desvalidas de nuestro país con el solo propósito de educarlos en solidaridad. No vale la pena ser un buen dentista si no es un buen ser humano.
Al ofrecer servicios médicos gratuitos a los más necesitados, Tzu Chi espera dar el buen ejemplo y lograr que otros hagan lo mismo. ¿Qué mejor manera de empezar que con los estudiantes? Al inspirar a que mas y mas estudiantes dentro del campo médico ofrezcan sus apoyos, quizás ellos mismos querrán convertirse en miembros de TIMA (la Asociación Médica Tzu Chi, por sus siglas en inglés) en el futuro, por lo cual sería bueno para la fundación.
Nos sentimos contentos de este encuentro que se ha desarrollado porque quieren que sus estudiantes aprendan a servir con compasión. Al igual como lo hace Tzu Chi.
Los residentes de Portoviejo que recibieron servicios dentales se sienten agradecidos con Tzu Chi. Sobre todo, con los estudiantes. No solo por arreglarles los dientes, sino por devolverles las sonrisas. Cuando una persona puede sonreír, demuestra su luz ante el mundo, al igual como los voluntarios de Tzu Chi lo hacen tras rendir sus servicios.
